Rosquillas de anís

Cómo hacer rosquillas de anís caseras

Rosquillas de anís con chocolate blanco

Aunque las rosquillas de anís más conocidas siempre han sido las que solo llevan azúcar como cobertura exterior, hoy en día han proliferado un gran número de alternativas diferentes como por ejemplo las que os proponemos en esta entrada, rosquillas de anís con cobertura de chocolate blanco.

Se trata de una de las muchas variedades diferentes de rosquillas que podemos hacer y que sorprende desde el primer bocado gracias al estupendo maridaje entre el chocolate blanco y el resto de ingredientes.

Rosquillas de anís con chocolate blanco

Si quieres prepararlas necesitarás estos ingredientes:

  • 400 gramos de harina (tamizada)
  • 300 gramos de chocolate blanco.
  • 200 gramos de azúcar blanquilla.
  • 200 gramos de mantequilla.
  • 100 gramos de azúcar glas.
  • 50 gramos de leche.
  • 100 mililitros de anís.
  • 50 gramos de aceite de girasol.
  • 3 huevos de tamaño grande
  • Una cucharadita de levadura química.
  • Una cucharadita de azúcar avainillado.
  • Aceite de oliva virgen extra suave (0,44)

Modo de elaboración

El primer paso será tamizar la harina para evitar en medida de lo posible que se formen grumos cuando estemos preparando la mezcla.

Cuando la tengamos completamente tamizada en un bol le añadiremos la levadura, el aceite de girasol, los huevos, el azúcar (también el avainillado), el anís y la leche y lo batiremos todo para que quede bien ligado y el azúcar completamente disuelto.

Al principio podremos hacerlo con las varillas de la batidora pero llegará un momento en el que costará más trabajo. Es en ese momento en el que debemos ponernos un poco de harina en las manos y continuar a mano.

Cuando la masa haya alcanzado cierta consistencia tenemos que tapar el bol con film transparente y meter en la nevera durante una hora y media. Tras ese tiempo sacaremos la masa y dejaremos que se atempere. Mientras tanto pondremos el chocolate blanco en un cazo al baño maría para derretirlo. Y cuando esté hecho lo dejaremos en calor para mantenerlo con la textura deseada.

Ahora cogeremos un poco de la masa de las rosquillas y haremos formas alargadas, que iremos uniendo por los extremos y reservando. Pondremos una sartén a calentar con abundante aceite e iremos friendo las rosquillas.

A medida que vayan quedando doradas las sacaremos y reservaremos en un plato con papel de cocina absorbente para retirar el exceso de aceite. Después de que hayan enfriado las pasaremos a una rejilla (vale la del horno o la del microondas) y les echaremos el chocolate blanco por encima, dejamos que se solidifique un poco y pasamos a la siguiente hasta cubrirlas todas y ya estarán listas para consumir.

Consejos

Para derretir el chocolate es mejor hacerlo al baño maría dado que si lo hacemos en el microondas lo dejaremos demasiado seco y sin brillo. Si no queremos chocolate blanco podemos utilizar el chocolate con leche o el negro.