Rosquillas de anís

Cómo hacer rosquillas de anís caseras

Rosquillas de anís al horno

Las rosquillas de anís son uno de los clásicos del recetario español, elaboración que hacían nuestras abuelas y a su vez sus madres y sus abuelas. Nos encontramos con una dulce preparación que tiene tanto éxito que no es extraño que en tiendas gourmets en países extranjeros podamos llegar a encontrarlas empaquetadas.

Pero no hace falta irse a ningún lado para degustarlas, podemos hacerlas en casa de una forma tan fácil como la que vamos a compartir con vosotros en esta entrada:

Rosquillas de anís al horno
  • 200 gramos de harina (tamizada)
  • 1/2 cucharadita de levadura química.
  • 1/2 taza de azúcar blanquilla.
  • 1/2 taza de aceite de oliva virgen extra.
  • 1/4 taza de anís.
  • 1/4 cucharadita de sal.
  • 75 gramos de azúcar blanquilla (para la cobertura)
  • 1 huevo de tamaño grande.

Modo de elaboración

Mezclaremos en un bol el azúcar blanquilla, el aceite y el anís. Batiremos hasta que el azúcar se haya disuelto, algo que puede que nos lleve unos 5 minutos debido a la densidad del aceite.

Cuando el azúcar esté disuelto añadiremos el huevo y lo batiremos con un tenedor, aunque nos será mucho más fácil hacerlo manual con unas varillas o directamente con las varillas de la batidora, pero a velocidad suave para que no salpique.

Mezclaremos la harina, la levadura y la sal en un bol y echaremos la mezcla del aceite y azúcar que tenemos preparada. La removeremos bien con las varillas de la batidora hasta conseguir una pasta consistente. Taparemos el recipiente y lo meteremos en la nevera durante una hora para hacer que la levadura haga su labor.

Antes de que se cumpla la hora, precalentaremos el horno a unos 200/250 grados y colocaremos un papel parafinado sobre la bandeja del horno (que habremos sacado antes de precalentarlo).

Con una cucharada y media de masa, que ahora ya estará espesa y será maleable, iremos haciendo tiras y uniéndolas por los extremos, haciendo un círculo y colocándolo sobre el papel parafinado, procurando separarlas entre sí dos o tres centímetros porque en el horno crecerán.

Con la bandeja llena la meteremos en el horno durante 15 minutos hasta que estén doradas y hayan crecido. Cuando las saquemos las pasaremos por un plato con azúcar para que el calor haga que se adhiera. Dejaremos enfriar y ya estarán listas para comer.

Consejos

Para darles un plus más de sabor podemos añadir una cucharadita de canela a la mezcla o ralladura de limón o naranja, el sabor será delicioso.